
Posicionamiento del CAPSF ante la situación actual de la matrícula
LA ACTIVIDAD PROFESIONAL DE LOS ARQUITECTOS PRESENTA UNA DISMINUCIÓN IMPORTANTE EN LO QUE VA DEL AÑO 2016
El 2016 ha sido un año que para la actividad profesional de los arquitectos en su conjunto ha estado ostensiblemente condicionada por un clima recesivo, esta situación si bien atraviesa a todos los sectores de la economía, este impacto se concentra sobre el sector de la construcción en particular; arrojando como consecuencia una importante caída en la actividad de la obra privada, sector en el que nos movilizamos mayoritariamente los arquitectos independientes. En el actual escenario recesivo no se vislumbran síntomas de recuperación inmediata a fin de motorizar uno de los sectores más dinamizadores de la economía.
Según informes del INDEC la construcción fue uno de los sectores más golpeados con una caída del 19,2% en la medición interanual de octubre pasado que visto en el consumo de minerales no metálicos destinados a la actividad, muestran mermas que van del 18,2% al 21,7% en ítems como pisos y revestimientos, ladrillos huecos y sanitarios cerámicos. Indicadores que muestran importantes caídas especialmente en la construcción privada.
Por otro lado, La demora en la reactivación de la obra pública contribuye a deprimir estos indicadores, este síntoma también atraviesa la propia dinámica del sector industrial ya que el mismo ha reducido muy significativamente las inversiones para ampliaciones y mejoras edilicias.
En este contexto de inmovilidad socio económica, los arquitectos hemos disminuido nuestra actividad de modo significativo con caídas no menos importantes en el encargo de tareas profesionales para la ejecución de obras nuevas y/o ampliaciones. El Colegio de Arquitectos de la Provincia de Santa Fe registra en sus estadísticas una disminución DEL 20 % por encomiendas de tareas profesionales.
Las medidas implementadas para reactivar el ProCreAr si bien importantes en términos del acceso a la vivienda individual mediante la compra con el propósito de movilizar el mercado inmobiliario, como las anunciadas para 2017 que promueven la construcción de emprendimientos de escala, no contribuyen mayormente a mejorar el panorama de los arquitectos independientes. En este sentido, el acceso a la construcción y ampliación de la vivienda individual implementada oportunamente resultó un recurso que no sólo dinamizó la actividad profesional de la arquitectura como también de pequeños emprendedores, monotributistas, contratistas y pequeñas empresas que configuran un denso tejido socio productivo que impacta directamente sobre la movilidad socio económico territorial. Como dato cabe apuntar que según el Banco Hipotecario durante el primer semestre del 2015 se aprobaron y se contabilizaron 36.046 obras. Correspondieron a refacciones o ampliaciones del inmueble el 55%, mientras el 45% restante correspondieron a la construcción de nuevas unidades. En este sentido sería auspicioso que el ProCreAr recupere este tipo de formato como complemento, ya que apuntan ambos desde diferentes lugares a resolver la misma problemática con el aliciente movilizador que conllevaría.
Permanentemente desde el Colegio de Arquitectos de la provincia de Santa Fe se promueven acciones que propenden al desarrollo, afianzamiento e inserción en el campo socio productivo de la actividad profesional de los arquitectos. Con este objetivo se han firmado y reactivado convenios que tratan de ampliar las perspectivas laborales de los arquitectos de la provincia de Santa Fe con el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia de Santa Fe o y el Ministerio de Educación respectivamente, y a su vez promoviendo la modalidad del llamado a concursos de Proyectos. No obstante esto, somos conscientes que sólo la facilitación del acceso al crédito, la reactivación de una economía que recupere la generación de excedentes, que establezca mecanismos de distribución para el acceso al ahorro y la inversión de mediana y pequeña escala, pondrá en marcha el motor reactivador de todos los sectores que dinamizan la economía posibilitando generar las condiciones FAVORABLES para que la actividad profesional recupere la dinámica perdida.
La situación de clima recesivo no sólo nos preocupa por las condiciones en que se desarrolla la actividad profesional, sino porque la Industria de la construcción generadora de puestos de trabajo para la sociedad en su conjunto no da signos de reactivación.
Si no implementamos las medidas necesarias, primero para recuperarla y luego para motorizarla generará graves consecuencias en el campo laboral de la mayoría de los argentinos.
DIRECTORIO DEL CAPSF